Colaboración para La Información AYER Y HOY
articulosdeopinion2004@yahoo.com
DR. HUGO MENDOZA ( 1930-2009). FORJADOR DE LA PEDIATRIA DOMINICANA
Julio M. Rodriguez Grullón
Hugo Mendoza, poseedor de un gran talento, no lo utilizó para enriquecerse, sino para enseñar pediatría y elevar el nivel de la medicina dominicana en general. Fue un investigador incansable.
El titulo de esta entrega es con el que me manifestó quería ser recordado, en la entrevista que le realizara en ocasión de dedicarle Acta Medica Dominicana, su edición correspondiente a enero-febrero 1998. De esa semblanza extraemos los datos que aquí publicamos. Para mas información sobre el Dr. Hugo Mendoza, ver Act Med Dom 1998;1: 11-16 y 35.
Nació en La Vega, donde fue alfabetizado tempranamente en la escuelita particular de la profesora Barbina Ceara y en donde mostró precozmente sus cualidades. Cuando tuvo edad para ser inscrito en la escuela pública, lo ubicaron en el 2do curso. Al año siguiente pasó al colegio privado Alta Escuela Juan Pablo Duarte, donde terminó sus estudios primarios y pasó a la escuela normal de La Vega, dirigida por el profesor Darío Concepción. Se graduó de bachiller en Ciencias Físicas y Naturales en 1948 y se trasladó a la ciudad capital, a realizar sus estudios en medicina. En la Universidad solo tuvo que pagar la primera inscripción, pues se ganó gratis las demás, por sus brillantes calificaciones académicas.
Cursando el 5to año de la carrera, fue nombrado practicante en la maternidad Nta Señora de la Altagracia, asignado al área de recién nacidos; entonces descubrió su inclinación por la pediatría y pidió su traslado al hospital de niños Ramfis. Se graduó de médico en la promoción de 1954. Quiso salir al extranjero, pero la dictadura trujillista no le permitía obtener pasaporte, hasta que en 1956 llegó a la Vicerectoría de la Universidad, Luis Gonzalez Posada S.J., quien creó becas para enviar a estudiar al extranjero a jóvenes brillantes y así Mendoza pudo salir del país y dirigirse a España.
Estudió pediatría dos años en Madrid, pasó de ahí a Inglaterra, becado por el Guy Hospital en Londres, donde permaneció seis meses. En 1959 se dirigió a los Estados Unidos de America. En el Elmhurst City Hospital en Nueva York permaneció tres años, fue jefe de residentes en 1962 y aprobó el Board Americano de Pediatría ese mismo año. Estaba contratado como profesor auxiliar de pediatría por la New York University, cuando decidió regresar a su país en julio de 1982, después de seis años de estudios en el extranjero.
Inició su extraordinaria carrera trabajando gratis por las mañanas en el hospital de niños Dr. Robert Reid Cabral; simultaneamente abrió su consultorio privado en el Grupo del Dr. Mairení Cabral en la calle Dr. Delgado No.30, donde laboró por las tardes por mas de 40 años. En 1963 fue nombrado oficialmente en el Hospital de niños y también casó con la bella joven Rosa Leda Valdes, formando su familia de cinco hijos, todos profesionales.
Desde 1962 hasta su muerte, Hugo Mendoza realizó la mas estupenda labor llevada a cabo por un pediatra dominicano. Resumiremos aquí sus logros mas sobresalientes.
Reactivación de la Sociedad Dominicana de Pediatría (1962) y Presidente de la misma (1964-65), rescate de la Revista Archivos Dominicanos de Pediatría (1965) siendo su Director y Editor hasta 1984. Profesor y Jefe de la Cátedra de Pediatría de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (1969-1990), impulsor de la primera residencia médica en el país, la residencia de pediatría, en el Hospital Dr. Robert Reid Cabral en 1966, Director del Hospital Dr. Robert Reid Cabral (1968-1986). Autor de mas de 500 artículos originales de investigación publicados en revistas científicas médicas nacionales y extranjeras. Fundador en 1986 del Centro Nacional de Investigaciones en Salud Materno Infantil (CENISMI), el cual dirigió hasta 1996.
Al margen
Esplendida la ceremonia con la que este diario celebró el 94 avo aniversario de su fundación, al tiempo de lanzar su nuevo formato. Genial la idea de reproducir la primera edición del periódico en 1915, junto a un ejemplar del nuevo formato. Felicitamos al Presidente de la Nueva Editora La Información Príamo Rodriguez Castillo, al director del periódico, Enmanuel Ramos, asi como a todo el personal que labora en esta empresa.
juliomanuelrodriguez.blogspot.com
sábado, 21 de noviembre de 2009
lunes, 16 de noviembre de 2009
El Cardenal Giuseppe Fietta
Colaboración para La Información AYER Y HOY
articulosdeopinion2004@yahoo.com EL CARDENAL GIUSEPPE FIETTA (1883-1960)
Julio M. Rodriguez Grullón
El primer nuncio en representar la Santa Sede en nuestro país lo fue Monseñor Giuseppe Fietta. Había nacido en Ivrea, Italia, en 1883 y fue ordenado sacerdote en 1906 a los 23 años de edad. Entró en la carrera diplomática del Vaticano en 1924, cuando fue nombrado Secretario de la nunciatura en Costa Rica. En 1926 fue ascendido a internuncio en Centroamérica.
En 1930 fue designado internuncio de esta isla, con asiento en Puerto Príncipe. Presentó sus cartas credenciales ante Trujillo, el 20 de febrero de 1931.
Por su conducta ante Trujillo y sus actuaciones en nuestro país, podemos apreciar, mas de setenta años después, que Fietta era un hombre muy capaz.
Inmediatamente de llegar, apreció la postración en que estada sumida la Iglesia Católica Dominicana, a quien la ilustración local había borrado del mapa legal y que ya los mejores días de Monseñor Nouel habían pasado.
Para mi no es coincidencia con la llegada de Fietta, que Trujillo promulgara la ley que otorgaba personería jurídica a la Iglesia en abril de 1931, asignándole una subvención y que Monseñor Nouel renunciara de su cargo en junio de ese año. Pienso que ambas cosas fueron producidas por la influencia de el.
El primer nuncio en el país, también se percató del bajo nivel del clero nacional, arrastrando desde tiempos coloniales su lacras de simonía y concubinato. Para el, solo dos sacerdotes reunían las condiciones para dirigir la iglesia dominicana, Armando Lamarche y Rafael Castellanos y no titubeó en recomendarlos a Roma para la máxima jerarquía eclesiástica en el país, a sabiendas de que Castellanos, con su antecedente de miembro de la Unión Nacional Dominicana y por tanto radical opositor de la intervención americana de 1916-24, tendría enfren-tamientos con un producto de esa intervención, como era Trujillo.
Al morir ambos, recomendó a Roma la necesidad de que la dirección de nuestra iglesia pasara a manos de un sacerdote extranjero poseedor de una gran espiritualidad, que fuera respaldado por una orden sacerdotal fuerte y es así como es designado el salesiano, italiano, Ricardo Pittini, para esta posición.
Ahora bien, Pittini siguió la línea política de los papas Pio XI y Pio XII, de apoyar regímenes autoritarios anticomunistas, como forma de luchar contra esta doctrina y de ahí su apoyo a Trujillo, pero no hay dudas de que elevó notablemente el nivel del clero. El clero dominicano a partir de los 1950, era muy diferente al que el encontró, tanto en su aspecto intelectual, como en el moral.
Fietta continuó su carrera ascendente como diplomático de la Santa Sede, al ser designado nuncio en Argentina en 1936, siendo sustituido en esta isla por Maurilio Silvani, quien al día siguiente de presentar sus credenciales, impuso a Trujillo la condecoración pontificia de San Gregorio Magno, que le otorgaba el Papa Pio XI.
En Argentina, Fietta desempeñó sus funciones de nuncio hasta 1953, en que fue sustituido por Mario Zanin. Nótese el parecido del apellido Zanin, con el de Zanini, que es lo que confundió al dictador argentino Domingo Perón, quien en 1959 dijo a Trujillo, que Lino Zanini, a quien el Papa Juan XXIII había designado nuncio en nuestro país, había sido de los culpables de su caída, mientras desempeñaba sus funciones de nuncio allí. Perón abandonó poco después la Republica Dominicana de Trujillo y se marchó a vivir a la España de Franco.
Un simple chequeo de esta información por la cancillería dominicana, hubiera demostrado que en realidad, Zanini provenía de Irak y que Perón se había confundido, por lo parecido de los apellidos de estos dos nuncios.
De Argentina, Fietta fue trasladado a Roma, como nuncio ante el gobierno italiano, posición que ejerció hasta 1958; en diciembre de este año, Juan XXIII lo elevó a la categoría de Cardenal de la Iglesia Católica.
Fietta murió en su Ivrea natal, a los 76 años de edad, 22 meses después de recibir el capelo cardenalicio y está enterrado en la catedral de esa ciudad.
juliomanuelrodriguez.blogspot.com
articulosdeopinion2004@yahoo.com EL CARDENAL GIUSEPPE FIETTA (1883-1960)
Julio M. Rodriguez Grullón
El primer nuncio en representar la Santa Sede en nuestro país lo fue Monseñor Giuseppe Fietta. Había nacido en Ivrea, Italia, en 1883 y fue ordenado sacerdote en 1906 a los 23 años de edad. Entró en la carrera diplomática del Vaticano en 1924, cuando fue nombrado Secretario de la nunciatura en Costa Rica. En 1926 fue ascendido a internuncio en Centroamérica.
En 1930 fue designado internuncio de esta isla, con asiento en Puerto Príncipe. Presentó sus cartas credenciales ante Trujillo, el 20 de febrero de 1931.
Por su conducta ante Trujillo y sus actuaciones en nuestro país, podemos apreciar, mas de setenta años después, que Fietta era un hombre muy capaz.
Inmediatamente de llegar, apreció la postración en que estada sumida la Iglesia Católica Dominicana, a quien la ilustración local había borrado del mapa legal y que ya los mejores días de Monseñor Nouel habían pasado.
Para mi no es coincidencia con la llegada de Fietta, que Trujillo promulgara la ley que otorgaba personería jurídica a la Iglesia en abril de 1931, asignándole una subvención y que Monseñor Nouel renunciara de su cargo en junio de ese año. Pienso que ambas cosas fueron producidas por la influencia de el.
El primer nuncio en el país, también se percató del bajo nivel del clero nacional, arrastrando desde tiempos coloniales su lacras de simonía y concubinato. Para el, solo dos sacerdotes reunían las condiciones para dirigir la iglesia dominicana, Armando Lamarche y Rafael Castellanos y no titubeó en recomendarlos a Roma para la máxima jerarquía eclesiástica en el país, a sabiendas de que Castellanos, con su antecedente de miembro de la Unión Nacional Dominicana y por tanto radical opositor de la intervención americana de 1916-24, tendría enfren-tamientos con un producto de esa intervención, como era Trujillo.
Al morir ambos, recomendó a Roma la necesidad de que la dirección de nuestra iglesia pasara a manos de un sacerdote extranjero poseedor de una gran espiritualidad, que fuera respaldado por una orden sacerdotal fuerte y es así como es designado el salesiano, italiano, Ricardo Pittini, para esta posición.
Ahora bien, Pittini siguió la línea política de los papas Pio XI y Pio XII, de apoyar regímenes autoritarios anticomunistas, como forma de luchar contra esta doctrina y de ahí su apoyo a Trujillo, pero no hay dudas de que elevó notablemente el nivel del clero. El clero dominicano a partir de los 1950, era muy diferente al que el encontró, tanto en su aspecto intelectual, como en el moral.
Fietta continuó su carrera ascendente como diplomático de la Santa Sede, al ser designado nuncio en Argentina en 1936, siendo sustituido en esta isla por Maurilio Silvani, quien al día siguiente de presentar sus credenciales, impuso a Trujillo la condecoración pontificia de San Gregorio Magno, que le otorgaba el Papa Pio XI.
En Argentina, Fietta desempeñó sus funciones de nuncio hasta 1953, en que fue sustituido por Mario Zanin. Nótese el parecido del apellido Zanin, con el de Zanini, que es lo que confundió al dictador argentino Domingo Perón, quien en 1959 dijo a Trujillo, que Lino Zanini, a quien el Papa Juan XXIII había designado nuncio en nuestro país, había sido de los culpables de su caída, mientras desempeñaba sus funciones de nuncio allí. Perón abandonó poco después la Republica Dominicana de Trujillo y se marchó a vivir a la España de Franco.
Un simple chequeo de esta información por la cancillería dominicana, hubiera demostrado que en realidad, Zanini provenía de Irak y que Perón se había confundido, por lo parecido de los apellidos de estos dos nuncios.
De Argentina, Fietta fue trasladado a Roma, como nuncio ante el gobierno italiano, posición que ejerció hasta 1958; en diciembre de este año, Juan XXIII lo elevó a la categoría de Cardenal de la Iglesia Católica.
Fietta murió en su Ivrea natal, a los 76 años de edad, 22 meses después de recibir el capelo cardenalicio y está enterrado en la catedral de esa ciudad.
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sábado, 7 de noviembre de 2009
La Iglesia y el comunismo
Colaboración para La Información AYER Y HOY
articulosdeopinion2004@yahoo.com LA IGLESIA Y EL COMUNISMO
Julio M. Rodriguez Grullón
Una de las consecuencias de la 1ra guerra mundial, fue el triunfo de la revolución bolchevi-que en 1917 en Rusia , que llevó al poder, en el país mas grande del mundo de esos días, al co-munismo, un régimen que pregonaba la dictadura del proletariado y que imponía un ateismo militante. El comunismo estaba determinado a dominar el mundo y los partidos comunistas en Europa y el resto del planeta, atacaban agresivamente la religión, llamándola entre otras cosas, el opio de los pueblos. Donde quiera que estos partidos tomaban el poder, cerraban iglesias y deportaban o asesinaban sacerdotes.
La Iglesia Católica y las religiones en general, nunca habían enfrentado una amenaza semejante, pues el laicismo de la IIustración europea, respetaba las creencias religiosas individuales, aunque colocaba la razón por encima de todo y rechazaba las enseñanzas de una religión revelada, como la cristiana. Fue esta doctrina que dio origen a la democracia burguesa, que llegó al poder en Estados Unidos en abril de 1789 y en Francia en julio de ese mismo año.
La Iglesia Católica se negaba a aceptar la separación de Iglesia y Estado difundida por esta democracia, a pesar del fracaso de la teocracia cristiana, que en el siglo XVI, había provocado la división del cristianismo y cruentas guerras, entre los que estaban llamados a amarse unos a otros.
La reacción de los papas Pío XI (1922-1939) y Pío XII (1939-1958) frente al comunismo, fue apoyar regímenes autoritarios que en esos años surgieron, como el llamado fascismo, Mussolini en Italia en 1922 y Franco en España, en 1939, (después de una sangrienta guerra civil de tres años), con quienes estos papas firmaron concordatos, que convertían el catolicismo en la religión oficial del estado y perseguían por todos los medios al comunismo.
En Alemania, en 1933, llegó al poder Adolfo Hitler, un demagogo, pregonando la superioridad racial aria, e instalando un régimen despótico, anticomunista, el socialismo nacional (nazismo), que fue bien recibido inicialmente por el pueblo por la frustración y humillación acumuladas en el , por la imposición de los abusivos tratados de Versalles de 1919, una vez terminada la 1ra guerra mundial. Los alemanes vieron bien su armamentismo y su deseo de reivindicar, la supremacía de ellos en Europa y el resto del mundo.
Pio XI firmó un concordato con Hitler, en julio de 1933, seis meses después de subir este al poder, pasándole por encima a la opinión de los obispos alemanes, que se oponían a este acuerdo. En 1937, el Papa comprendió su error y en marzo de ese año, lanzó su encíclica Mit brennender Sorge (Con viva preocupación), escrita originalmente en alemán, donde rechazaba el régimen nazi, porque “tomaba la raza y otros elementos fundamentales de la sociedad humana y los divinizaba con culto idolátrico, pervirtiendo y falsificando el orden creado e impuesto por Dios”. Dos años y medio después, estallaba la segunda guerra mundial.
Trujillo se beneficio de esta política de la Santa Sede, que Pittini aplicó en el país, fortaleciendo su régimen autoritario ideológicamente, a la vez que la Iglesia obtenía beneficios materiales, que la sacaron de la situación precaria, que venía arrastrando desde los tiempos coloniales. El papa Pio XI condecoró a Trujillo en 1936, con la orden de San Gregorio Magno, en una clara aprobación de su régimen. Pio XII, posteriormente, en 1954, firmó un concordato con el (todo un anacronismo aun vigente) y también condecoró a Trujillo con La Gran Cruz de la Orden Papal. Fue el papa Juan XXIII (1958-1963) quien apartó al Vaticano de esta línea política, separó la Iglesia del régimen trujillista, convocó el concilio Vaticano II, que revolucionó la Iglesia, donde en 1965, en el documento Gaudium et spes (La Iglesia en el mundo actual), se aceptó la separación entre Iglesia y Estado.
Finalmente, en 1989, el Papa Juan Pablo II, (1978-2005) un gran aliado del presidente de Estados Unidos Ronald Reagan, con el líder obrero polaco Lesch Walesa y el sindicato solidaridad , como cabeza de lanza, asestó al comunismo un “derechazo” , que lo sacó del poder en Polonia, país natal del Papa, de los países de Europa Oriental y luego de Rusia, sin derramar una gota de sangre, terminando así esta gran amenaza contra la religión.
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Julio M. Rodriguez Grullón
Una de las consecuencias de la 1ra guerra mundial, fue el triunfo de la revolución bolchevi-que en 1917 en Rusia , que llevó al poder, en el país mas grande del mundo de esos días, al co-munismo, un régimen que pregonaba la dictadura del proletariado y que imponía un ateismo militante. El comunismo estaba determinado a dominar el mundo y los partidos comunistas en Europa y el resto del planeta, atacaban agresivamente la religión, llamándola entre otras cosas, el opio de los pueblos. Donde quiera que estos partidos tomaban el poder, cerraban iglesias y deportaban o asesinaban sacerdotes.
La Iglesia Católica y las religiones en general, nunca habían enfrentado una amenaza semejante, pues el laicismo de la IIustración europea, respetaba las creencias religiosas individuales, aunque colocaba la razón por encima de todo y rechazaba las enseñanzas de una religión revelada, como la cristiana. Fue esta doctrina que dio origen a la democracia burguesa, que llegó al poder en Estados Unidos en abril de 1789 y en Francia en julio de ese mismo año.
La Iglesia Católica se negaba a aceptar la separación de Iglesia y Estado difundida por esta democracia, a pesar del fracaso de la teocracia cristiana, que en el siglo XVI, había provocado la división del cristianismo y cruentas guerras, entre los que estaban llamados a amarse unos a otros.
La reacción de los papas Pío XI (1922-1939) y Pío XII (1939-1958) frente al comunismo, fue apoyar regímenes autoritarios que en esos años surgieron, como el llamado fascismo, Mussolini en Italia en 1922 y Franco en España, en 1939, (después de una sangrienta guerra civil de tres años), con quienes estos papas firmaron concordatos, que convertían el catolicismo en la religión oficial del estado y perseguían por todos los medios al comunismo.
En Alemania, en 1933, llegó al poder Adolfo Hitler, un demagogo, pregonando la superioridad racial aria, e instalando un régimen despótico, anticomunista, el socialismo nacional (nazismo), que fue bien recibido inicialmente por el pueblo por la frustración y humillación acumuladas en el , por la imposición de los abusivos tratados de Versalles de 1919, una vez terminada la 1ra guerra mundial. Los alemanes vieron bien su armamentismo y su deseo de reivindicar, la supremacía de ellos en Europa y el resto del mundo.
Pio XI firmó un concordato con Hitler, en julio de 1933, seis meses después de subir este al poder, pasándole por encima a la opinión de los obispos alemanes, que se oponían a este acuerdo. En 1937, el Papa comprendió su error y en marzo de ese año, lanzó su encíclica Mit brennender Sorge (Con viva preocupación), escrita originalmente en alemán, donde rechazaba el régimen nazi, porque “tomaba la raza y otros elementos fundamentales de la sociedad humana y los divinizaba con culto idolátrico, pervirtiendo y falsificando el orden creado e impuesto por Dios”. Dos años y medio después, estallaba la segunda guerra mundial.
Trujillo se beneficio de esta política de la Santa Sede, que Pittini aplicó en el país, fortaleciendo su régimen autoritario ideológicamente, a la vez que la Iglesia obtenía beneficios materiales, que la sacaron de la situación precaria, que venía arrastrando desde los tiempos coloniales. El papa Pio XI condecoró a Trujillo en 1936, con la orden de San Gregorio Magno, en una clara aprobación de su régimen. Pio XII, posteriormente, en 1954, firmó un concordato con el (todo un anacronismo aun vigente) y también condecoró a Trujillo con La Gran Cruz de la Orden Papal. Fue el papa Juan XXIII (1958-1963) quien apartó al Vaticano de esta línea política, separó la Iglesia del régimen trujillista, convocó el concilio Vaticano II, que revolucionó la Iglesia, donde en 1965, en el documento Gaudium et spes (La Iglesia en el mundo actual), se aceptó la separación entre Iglesia y Estado.
Finalmente, en 1989, el Papa Juan Pablo II, (1978-2005) un gran aliado del presidente de Estados Unidos Ronald Reagan, con el líder obrero polaco Lesch Walesa y el sindicato solidaridad , como cabeza de lanza, asestó al comunismo un “derechazo” , que lo sacó del poder en Polonia, país natal del Papa, de los países de Europa Oriental y luego de Rusia, sin derramar una gota de sangre, terminando así esta gran amenaza contra la religión.
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domingo, 1 de noviembre de 2009
Colaboración para La Información AYER Y HOY
articulosdeopinion2004@yahoo.com LEY DE MONEDA Y CENSO DE 1935
Julio M. Rodriguez Grullón
Mientras se realizaban las negociaciones para establecer definitivamente la línea fronteriza con Haití, Trujillo procedió a dotar al estado dominicano de la capacidad de acuñar una moneda metálica, basada en el patrón plata, que sacaría del territorio nacional las monedas norteamericana y haitiana.
Pasaría mas de una década, hasta que el régimen estuviera en condiciones de imprimir papel moneda y de establecer un banco central, pero la existencia de una moneda metálica, permitió, en un país pobre y con los precios de la época, que la gran mayoría de las transacciones cotidianas, privadas y comerciales, se realizaran ahora con dinero dominicano.
Es interesante notar que esta moneda sería equivalente al dólar de los Estados Unidos y estaría fraccionada en monedas de plata de un peso, medio peso, veinte y cinco centavos y de diez centavos. A las denominaciones mas pequeñas, correspondían una moneda de níquel de cinco centavos y una moneda de cobre de un centavo.
La composición, el peso, la forma y las dimensiones de las monedas, serían las mismas que las de las monedas de iguales denominaciones de los Estados Unidos.
Al tiempo que organizaba el estado, Trujillo quiso saber con que contaba en el territorio nacional y para ello organizó un censo confeccionado en bases rigurosamente científicas, dividido en tres partes, viviendas, población y agropecuario.
De realizar este censo se encargó al Partido Dominicano, presidido en esos momentos por Mario Fermín Cabral, uno de sus cortesanos mas prominentes, de tal forma que al terminarse dicho proceso, Trujillo sabía exactamente todo lo referente a la población dominicana, incluyendo nombres, apodos, escolaridad , tipo de vivienda y propiedades , ocupaciones y hasta defectos físicos. Como los presidentes de las juntas provinciales y municipales del Partido Dominicano tenían que enviarle regularmente informes de lo que ocurría en sus demarcaciones, Trujillo sabría al dedillo lo que ocurría en todo el territorio nacional.
Súmese a esto que en las carreteras que se iban construyendo, se instalaron aproximadamente cada 30 kilómetros, puestos de chequeos, en los que el conductor del vehiculo tenia forzosamente que detenerse, (pues se construyeron los llamados policías acostados, que cruzaban la vía) y decir su nombre, procedencia y destino; los militares anotaban el número de la placa y la hora en que el vehiculo cruzó por allí.
Trujillo estaba omnipresente en la vida de todos.
Las datos mas importantes que arrojó este censo, son interesantes de conocer.
Para 1935 vivían en este país 1,479,417 personas, de los cuales 998,733 (67.6%) eran mestizos, 192,733 (13.0%) blancos, 287,677 (19.4%) negros y 339 (0.02%) amarillos. Un total de 73,070 (4.9%) eran extranjeros de los cuales 60,517 (82.8%) eran haitianos . Un 50.7% de la población pertenecía al sexo masculino y 49.3% al femenino.
La población urbana constituía un 17.8% y la rural 82.2%. Eramos obviamente un país rural. Santo Domingo, la capital tendría unos 80 mil habitantes y comenzaba a desbordar los límites de la muralla de los tiempos coloniales.
Para esta época solo un 20% de la población estaba alfabetizada y Trujillo ya había lanzado un agresivo programa de alfabetización, con una cartilla cívica, que al tiempo que alfabetizaba y educaba, reforzaba su autoridad.
La economía del país dependía de la agricultura y el principal cultivo y producto de exportación era la caña de azucar, promovido en las últimas décadas del siglo XIX y extendida por la región este durante la ocupación americana, por medios fraudulentos. Al azucar seguía la producción de plátanos, que se consumían localmente, así como café, cacao, arroz, habichuelas y otros productos. No teníamos industrias para procesar ninguno de nuestros productos naturales y en la pecuaria predominaban el ganado vacuno y porcino, criados bucólicamente, como los tiempos coloniales.
juliomanuelrodriguez.blogspot.com
articulosdeopinion2004@yahoo.com LEY DE MONEDA Y CENSO DE 1935
Julio M. Rodriguez Grullón
Mientras se realizaban las negociaciones para establecer definitivamente la línea fronteriza con Haití, Trujillo procedió a dotar al estado dominicano de la capacidad de acuñar una moneda metálica, basada en el patrón plata, que sacaría del territorio nacional las monedas norteamericana y haitiana.
Pasaría mas de una década, hasta que el régimen estuviera en condiciones de imprimir papel moneda y de establecer un banco central, pero la existencia de una moneda metálica, permitió, en un país pobre y con los precios de la época, que la gran mayoría de las transacciones cotidianas, privadas y comerciales, se realizaran ahora con dinero dominicano.
Es interesante notar que esta moneda sería equivalente al dólar de los Estados Unidos y estaría fraccionada en monedas de plata de un peso, medio peso, veinte y cinco centavos y de diez centavos. A las denominaciones mas pequeñas, correspondían una moneda de níquel de cinco centavos y una moneda de cobre de un centavo.
La composición, el peso, la forma y las dimensiones de las monedas, serían las mismas que las de las monedas de iguales denominaciones de los Estados Unidos.
Al tiempo que organizaba el estado, Trujillo quiso saber con que contaba en el territorio nacional y para ello organizó un censo confeccionado en bases rigurosamente científicas, dividido en tres partes, viviendas, población y agropecuario.
De realizar este censo se encargó al Partido Dominicano, presidido en esos momentos por Mario Fermín Cabral, uno de sus cortesanos mas prominentes, de tal forma que al terminarse dicho proceso, Trujillo sabía exactamente todo lo referente a la población dominicana, incluyendo nombres, apodos, escolaridad , tipo de vivienda y propiedades , ocupaciones y hasta defectos físicos. Como los presidentes de las juntas provinciales y municipales del Partido Dominicano tenían que enviarle regularmente informes de lo que ocurría en sus demarcaciones, Trujillo sabría al dedillo lo que ocurría en todo el territorio nacional.
Súmese a esto que en las carreteras que se iban construyendo, se instalaron aproximadamente cada 30 kilómetros, puestos de chequeos, en los que el conductor del vehiculo tenia forzosamente que detenerse, (pues se construyeron los llamados policías acostados, que cruzaban la vía) y decir su nombre, procedencia y destino; los militares anotaban el número de la placa y la hora en que el vehiculo cruzó por allí.
Trujillo estaba omnipresente en la vida de todos.
Las datos mas importantes que arrojó este censo, son interesantes de conocer.
Para 1935 vivían en este país 1,479,417 personas, de los cuales 998,733 (67.6%) eran mestizos, 192,733 (13.0%) blancos, 287,677 (19.4%) negros y 339 (0.02%) amarillos. Un total de 73,070 (4.9%) eran extranjeros de los cuales 60,517 (82.8%) eran haitianos . Un 50.7% de la población pertenecía al sexo masculino y 49.3% al femenino.
La población urbana constituía un 17.8% y la rural 82.2%. Eramos obviamente un país rural. Santo Domingo, la capital tendría unos 80 mil habitantes y comenzaba a desbordar los límites de la muralla de los tiempos coloniales.
Para esta época solo un 20% de la población estaba alfabetizada y Trujillo ya había lanzado un agresivo programa de alfabetización, con una cartilla cívica, que al tiempo que alfabetizaba y educaba, reforzaba su autoridad.
La economía del país dependía de la agricultura y el principal cultivo y producto de exportación era la caña de azucar, promovido en las últimas décadas del siglo XIX y extendida por la región este durante la ocupación americana, por medios fraudulentos. Al azucar seguía la producción de plátanos, que se consumían localmente, así como café, cacao, arroz, habichuelas y otros productos. No teníamos industrias para procesar ninguno de nuestros productos naturales y en la pecuaria predominaban el ganado vacuno y porcino, criados bucólicamente, como los tiempos coloniales.
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sábado, 24 de octubre de 2009
Nuestrqs excusas a Jimmy Carter
articulosdeopinion2004@yahoo.com NUESTRAS EXCUSAS A JIMMY CARTER
Julio M. Rodriguez Grullón
Recientemente, el 39 avo presidente de los Estados Unidos (1977-81) nos visitó y como parte de su agenda de combatir enfermedades a nivel mundial, anunció la implementación de un programa de diez años para erradicar la malaria (paludismo) en esta isla y dijo que en ella era imposible hacerlo sin que se llevara a cabo simultaneamente en los dos países en que está dividida; de refilón señaló que hay que ver la solución a los problemas de esta isla, bajo la óptica de los dos países. Estas declaraciones están llenas de sentido común y la compartimos.
También dijo que no podemos contener la invasión pacífica haitiana y que tenemos que colaborar en el desarrollo de Haití. Nosotros creemos que si el ejército dominicano se lo propone, si se puede contener esa invasión pacifica, pero por no estar de acuerdo con esta parte de sus declaraciones, no se justifica, que funcionarios reformistas, enquistados en el gobierno del PLD, la emprendieran contra el, encabezados por el Canciller de la República.
Con razón, el Secretario de Estado de Salud Pública, Dr. Bautista Rojas Gómez expresó, que alguien debía presentar excusas al Señor Carter.
Para respaldar estas declaraciones del Dr. Rojas Gómez, vamos a ilustrar, a grandes rasgos, a nuestros lectores, quien es Jimmy Carter.
Recién ha cumplido 85 años de edad y los reformistas, que aupaban a Balaguer bien pasado de los 90, se refieren peyorativamente a esto. Ganó las elecciones presidenciales de su pais en 1976, porque el electorado, después del escándalo de Watergate, quería un presidente que trajera moralidad al gobierno federal y el candidato demócrata, ex-gobernador del estado de Georgia, prometía esto y lo cumplió. No pudo reelegirse porque la inflación era incontrolable, la invasión rusa de Afganistán y el fracaso en rescatar unos prisioneros americanos en Irán.
Durante sus cuatro años en la Casa Blanca, Carter en este continente:
a) Apoyó la revolución sandinista, que terminó con la odiosa tiranía de los Somoza en Nicaragua. b) Impidió que Balaguer, quien se creía imprescindible en la presidencia de este país, desconociera el resultado de las elecciones, que abrumadoramente le daban el triunfo a Antonio Guzmán y el PRD. Los militares, en ese entonces lamentablemente politizados, interrumpieron el conteo de votos y por tres días, en mayo de 1978, el país permaneció en vilo, hasta que la voluntad del pueblo dominicano se impuso, lo cual hubiera sido imposible en ese momento, sin la ayuda de Jimmy Carter. Este es el origen de la ojeriza reformista contra este señor.
c) Firmó el tratado Torrijos-Carter que entregó a Panamá el control del canal interoceánico y la zona a ambos lados de el, como debía ser.
En Camp David, logró un acuerdo de paz entre Egipto e Israel, que todavía perdura.
Dentro de los Estados Unidos creó en el gobierno federal, los nuevos ministerios de energía y de educación, desreguló la industria de la aviación, surgiendo así nuevas aerolíneas y empleó gran cantidad de hispanos, negros y mujeres en el gobierno federal.
Pero es luego de salir de la presidencia, que la figura de Jimmy Carter se ha agigantado.
En 1982 creó el Centro Carter en Atlanta, para promover la paz, combatir enfermedades y llevar esperanza de mejor vida a los oprimidos. Los resultados han sido espectaculares.
La dracunculiasis, una enfermedad incapacitante, con frecuencia mortal, producida por un parásito, de la que en 1986 ocurrieron 3.5 millones de casos en Asia y Africa, fue reducida a 4,619 casos para marzo 2009, una disminución de 99.8% y se piensa está cercana su erradicación. Ha supervisado elecciones y negociado para evitar o terminar guerras en innumerables ocasiones así como traído esperanza de mejor vida, a pobres en mas de 70 países. Por eso, en el año 2002, le fue concedido el Premio Nobel de la paz, 21 años después de salir de la presidencia, a diferencia de los presidentes Teddy Roosevelt, Woodrow Wilson y Barack Obama, a quienes se le ha concedido el premio mientras aun ejercen el cargo.
Ese año, visitó a Cuba, condenó el embargo y exhortó a celebrar elecciones libres.
Ojalá que dentro de 10 años, esta isla esté libre de la malaria, como se propone Carter.
juliomanuelrodriguez.blogspot.com
Julio M. Rodriguez Grullón
Recientemente, el 39 avo presidente de los Estados Unidos (1977-81) nos visitó y como parte de su agenda de combatir enfermedades a nivel mundial, anunció la implementación de un programa de diez años para erradicar la malaria (paludismo) en esta isla y dijo que en ella era imposible hacerlo sin que se llevara a cabo simultaneamente en los dos países en que está dividida; de refilón señaló que hay que ver la solución a los problemas de esta isla, bajo la óptica de los dos países. Estas declaraciones están llenas de sentido común y la compartimos.
También dijo que no podemos contener la invasión pacífica haitiana y que tenemos que colaborar en el desarrollo de Haití. Nosotros creemos que si el ejército dominicano se lo propone, si se puede contener esa invasión pacifica, pero por no estar de acuerdo con esta parte de sus declaraciones, no se justifica, que funcionarios reformistas, enquistados en el gobierno del PLD, la emprendieran contra el, encabezados por el Canciller de la República.
Con razón, el Secretario de Estado de Salud Pública, Dr. Bautista Rojas Gómez expresó, que alguien debía presentar excusas al Señor Carter.
Para respaldar estas declaraciones del Dr. Rojas Gómez, vamos a ilustrar, a grandes rasgos, a nuestros lectores, quien es Jimmy Carter.
Recién ha cumplido 85 años de edad y los reformistas, que aupaban a Balaguer bien pasado de los 90, se refieren peyorativamente a esto. Ganó las elecciones presidenciales de su pais en 1976, porque el electorado, después del escándalo de Watergate, quería un presidente que trajera moralidad al gobierno federal y el candidato demócrata, ex-gobernador del estado de Georgia, prometía esto y lo cumplió. No pudo reelegirse porque la inflación era incontrolable, la invasión rusa de Afganistán y el fracaso en rescatar unos prisioneros americanos en Irán.
Durante sus cuatro años en la Casa Blanca, Carter en este continente:
a) Apoyó la revolución sandinista, que terminó con la odiosa tiranía de los Somoza en Nicaragua. b) Impidió que Balaguer, quien se creía imprescindible en la presidencia de este país, desconociera el resultado de las elecciones, que abrumadoramente le daban el triunfo a Antonio Guzmán y el PRD. Los militares, en ese entonces lamentablemente politizados, interrumpieron el conteo de votos y por tres días, en mayo de 1978, el país permaneció en vilo, hasta que la voluntad del pueblo dominicano se impuso, lo cual hubiera sido imposible en ese momento, sin la ayuda de Jimmy Carter. Este es el origen de la ojeriza reformista contra este señor.
c) Firmó el tratado Torrijos-Carter que entregó a Panamá el control del canal interoceánico y la zona a ambos lados de el, como debía ser.
En Camp David, logró un acuerdo de paz entre Egipto e Israel, que todavía perdura.
Dentro de los Estados Unidos creó en el gobierno federal, los nuevos ministerios de energía y de educación, desreguló la industria de la aviación, surgiendo así nuevas aerolíneas y empleó gran cantidad de hispanos, negros y mujeres en el gobierno federal.
Pero es luego de salir de la presidencia, que la figura de Jimmy Carter se ha agigantado.
En 1982 creó el Centro Carter en Atlanta, para promover la paz, combatir enfermedades y llevar esperanza de mejor vida a los oprimidos. Los resultados han sido espectaculares.
La dracunculiasis, una enfermedad incapacitante, con frecuencia mortal, producida por un parásito, de la que en 1986 ocurrieron 3.5 millones de casos en Asia y Africa, fue reducida a 4,619 casos para marzo 2009, una disminución de 99.8% y se piensa está cercana su erradicación. Ha supervisado elecciones y negociado para evitar o terminar guerras en innumerables ocasiones así como traído esperanza de mejor vida, a pobres en mas de 70 países. Por eso, en el año 2002, le fue concedido el Premio Nobel de la paz, 21 años después de salir de la presidencia, a diferencia de los presidentes Teddy Roosevelt, Woodrow Wilson y Barack Obama, a quienes se le ha concedido el premio mientras aun ejercen el cargo.
Ese año, visitó a Cuba, condenó el embargo y exhortó a celebrar elecciones libres.
Ojalá que dentro de 10 años, esta isla esté libre de la malaria, como se propone Carter.
juliomanuelrodriguez.blogspot.com
sábado, 17 de octubre de 2009
Un estado sin frontera y sin poneda
Colaboración para La Información AYER Y HOY
articulosdeopinion2004@yahoo.com UN ESTADO SIN FRONTERA Y SIN MONEDA
Julio M. Rodriguez Grullón
Esa era la situación del estado dominicano al iniciar Trujillo su segundo período en agosto de 1934. Este, sintiéndose ya seguro en el poder, inició el proceso de resolver estos problemas, comenzando por el de la frontera. En esta entrega haremos una sinopsis de los hechos, para establecer la frontera entre los dos países hasta la firma del protocolo final entre Trujillo y Vincent, en 1936.
Los limites entre la colonia francesa y la española en la isla se establecieron en el tratado de Aranjuez en 1777, aunque en la parte norte de esos límites, los esclavos en la colonia francesa, al parecer estaban asentados en territorio que correspondió a la colonia española, donde estaban ubicadas las poblaciones de San Rafael, Hincha, Las Caobas y San Miguel de la Atalaya (1), lo que originó rozamientos con los habitantes de habla hispana que allí se encontraban y que como sabemos, fueron la causa de la migración de familias como los Santana Familia de esa zona.
Una vez declarada nuestra independencia en 1844, después de las victorias dominicanas de diciembre de 1855, en las batallas de Santomé y Cambronal y en la de Sabana Larga en enero de 1856, comenzó a funcionar una frontera informal entre los dos países.
En 1867, durante el segundo gobierno de José María Cabral, se produjo el primer intento de firmar un tratado de paz, amistad y comercio con Haití y de establecer, posteriormente, oficialmente, en un acuerdo especial , la línea divisoria entre los dos países. La iniciativa partió del presidente haitiano Fabré Geffrard, amigo de los dominicanos, pero aunque el congreso dominicano ratificó este acuerdo, al caer el gobierno de Geffrard, durante el proceso de las negociaciones, el congreso haitiano del Presidente Salnave, que le sucedió, lo rechazó y por lo tanto no se llegó a nada.Este tratado especial también fracasó, al intentarse en 1874, durante el primer gobierno de Ignacio María Gonzalez.
En 1896, el dictador Ulises Hereaux (Lilís), quien obtenía dinero de los haitianos, para en el tratado especial cederles los territorios de la parte norte, que incluían las poblaciones señaladas anteriormente con el (1), quiso que el Papa León XIII sirviera de árbitro y dictaminara sobre los límites entre las dos naciones, pero la influencia de Emiliano Tejera, logró que el Papa rehusara dictaminar nada y todo siguió igual. No obstante esto, Lilís, firmó un acuerdo con el Presidente haitiano General Sam, en la Mole de San Nicolás, el 28 de mayo de 1899, poco antes de caer abatido en Moca, pero este acuerdo tampoco llegó a ratificarse.
En 1901, se intentó de nuevo establecer la frontera durante el primer gobierno de Juan Isidro Jimenes, pero por la división ya existente entre horacistas y jimenistas, todo culminó en un desorden mayúsculo en la parte norte de la frontera y las cosas siguieron igual.
En 1907, en la Convención Dominico-Americana que aceptó Mon Cáceres, se colocaron la aduanas dominicanas en manos de los Estados Unidos y estos trazaron una frontera “de facto”, en 1912, tomando como referencia los límites que existían entre los dos países en 1856, donde colocaron aduanas para regular el comercio entre los dos países.
El 21 de enero de 1929, durante el gobierno de Horacio Vasquez, se firmó un acuerdo fronterizo, durante la presidencia de Louis Borneau en Haití, aceptando la frontera “de facto” de los americanos, aunque no se marcaron en este acuerdo, en el terreno, los límites exactos entre los dos países. El canje de ratificaciones de este acuerdo, se firmó en Santo Domingo, el 29 de ese mismo mes.
Con este acuerdo en mente, Trujillo, tan pronto tomó Franklin Delano Roosevelt la presidencia en los EEUUA en 1933 y anunció que los marines serían retirados de Haití, inició un acercamiento con el Presidente haitiano Stenio Vincent. En noviembre de 1934, realizó una visita oficial a Puerto Príncipe, que fue el primer paso para una serie de reuniones entre los dos mandatarios, quienes en marzo de 1935, firmaron un pacto en el que, “con absoluto respeto al tratado de 1929”, determinaron el trazado de la línea de demarcación. y convinieron en concertar un protocolo adicional, el cual firmaron en Santo Domingo, (recién denominada Ciudad Trujillo), el 9 de marzo de 1936, con lo que se puso punto final al asunto de la frontera entre los dos países.
Las poblaciones indicadas con el (1), quedaron en manos haitianas.
juliomanuelrodriguez.blogspot.com
articulosdeopinion2004@yahoo.com UN ESTADO SIN FRONTERA Y SIN MONEDA
Julio M. Rodriguez Grullón
Esa era la situación del estado dominicano al iniciar Trujillo su segundo período en agosto de 1934. Este, sintiéndose ya seguro en el poder, inició el proceso de resolver estos problemas, comenzando por el de la frontera. En esta entrega haremos una sinopsis de los hechos, para establecer la frontera entre los dos países hasta la firma del protocolo final entre Trujillo y Vincent, en 1936.
Los limites entre la colonia francesa y la española en la isla se establecieron en el tratado de Aranjuez en 1777, aunque en la parte norte de esos límites, los esclavos en la colonia francesa, al parecer estaban asentados en territorio que correspondió a la colonia española, donde estaban ubicadas las poblaciones de San Rafael, Hincha, Las Caobas y San Miguel de la Atalaya (1), lo que originó rozamientos con los habitantes de habla hispana que allí se encontraban y que como sabemos, fueron la causa de la migración de familias como los Santana Familia de esa zona.
Una vez declarada nuestra independencia en 1844, después de las victorias dominicanas de diciembre de 1855, en las batallas de Santomé y Cambronal y en la de Sabana Larga en enero de 1856, comenzó a funcionar una frontera informal entre los dos países.
En 1867, durante el segundo gobierno de José María Cabral, se produjo el primer intento de firmar un tratado de paz, amistad y comercio con Haití y de establecer, posteriormente, oficialmente, en un acuerdo especial , la línea divisoria entre los dos países. La iniciativa partió del presidente haitiano Fabré Geffrard, amigo de los dominicanos, pero aunque el congreso dominicano ratificó este acuerdo, al caer el gobierno de Geffrard, durante el proceso de las negociaciones, el congreso haitiano del Presidente Salnave, que le sucedió, lo rechazó y por lo tanto no se llegó a nada.Este tratado especial también fracasó, al intentarse en 1874, durante el primer gobierno de Ignacio María Gonzalez.
En 1896, el dictador Ulises Hereaux (Lilís), quien obtenía dinero de los haitianos, para en el tratado especial cederles los territorios de la parte norte, que incluían las poblaciones señaladas anteriormente con el (1), quiso que el Papa León XIII sirviera de árbitro y dictaminara sobre los límites entre las dos naciones, pero la influencia de Emiliano Tejera, logró que el Papa rehusara dictaminar nada y todo siguió igual. No obstante esto, Lilís, firmó un acuerdo con el Presidente haitiano General Sam, en la Mole de San Nicolás, el 28 de mayo de 1899, poco antes de caer abatido en Moca, pero este acuerdo tampoco llegó a ratificarse.
En 1901, se intentó de nuevo establecer la frontera durante el primer gobierno de Juan Isidro Jimenes, pero por la división ya existente entre horacistas y jimenistas, todo culminó en un desorden mayúsculo en la parte norte de la frontera y las cosas siguieron igual.
En 1907, en la Convención Dominico-Americana que aceptó Mon Cáceres, se colocaron la aduanas dominicanas en manos de los Estados Unidos y estos trazaron una frontera “de facto”, en 1912, tomando como referencia los límites que existían entre los dos países en 1856, donde colocaron aduanas para regular el comercio entre los dos países.
El 21 de enero de 1929, durante el gobierno de Horacio Vasquez, se firmó un acuerdo fronterizo, durante la presidencia de Louis Borneau en Haití, aceptando la frontera “de facto” de los americanos, aunque no se marcaron en este acuerdo, en el terreno, los límites exactos entre los dos países. El canje de ratificaciones de este acuerdo, se firmó en Santo Domingo, el 29 de ese mismo mes.
Con este acuerdo en mente, Trujillo, tan pronto tomó Franklin Delano Roosevelt la presidencia en los EEUUA en 1933 y anunció que los marines serían retirados de Haití, inició un acercamiento con el Presidente haitiano Stenio Vincent. En noviembre de 1934, realizó una visita oficial a Puerto Príncipe, que fue el primer paso para una serie de reuniones entre los dos mandatarios, quienes en marzo de 1935, firmaron un pacto en el que, “con absoluto respeto al tratado de 1929”, determinaron el trazado de la línea de demarcación. y convinieron en concertar un protocolo adicional, el cual firmaron en Santo Domingo, (recién denominada Ciudad Trujillo), el 9 de marzo de 1936, con lo que se puso punto final al asunto de la frontera entre los dos países.
Las poblaciones indicadas con el (1), quedaron en manos haitianas.
juliomanuelrodriguez.blogspot.com
sábado, 3 de octubre de 2009
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