sábado, 14 de noviembre de 2015

En relacion a la constitucion

Especial para la Informacion                                               AYER Y HOY
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                                                                                 Julio M. Rodríguez Grullón

            El pasado 6 de noviembre 2015 se conmemoró el 171 aniversario de la firma de nuestra primera constitución en San Cristobal, motivo por el cual se celebraron, apropiadamente, diversos actos alusivos a este importante acontecimiento, en varias localidades del país.
            Sin embargo, nos parece que siempre se olvida señalar algunos detalles importantes en relación a nuestra primera constitución.
            El primero es, que quien  primero comenzó a escribir nuestra constitución fue Duarte, aproximadamente en el mes de junio de 1844 y que tuvo que interrumpir su redacción por la llamada que le hizo Mella de que vinera al Cibao a resolver problemas que habían surgido entre los trinitarios y los seguidores de Bobadilla, los separatistas, que pretendían mantener los empleos públicos que ostentaban durante la dominación haitiana.
            La constitución de Duarte quedó inconclusa y solo nos han llegado fragmentos de ella, pero en ellos  se advierte un gran  énfasis en  la independencia y la dominicanidad, declarando también que los municipios constituían el 4to poder del estado.
            Mella, no solo pretendía que Duarte resolviera los problemas que se habían suscitado entre los dominicanos en el Cibao, sino que también quiso proclamarlo Presidente de la Republica y enfrentar así a Santana que no acataba la autoridad de la Junta Central Gubernativa, desde que los trinitarios habían expulsado de ella a Bobadilla y los afrancesados.
            Aunque al rechazar la petición de Mella, no lo dijo públicamente Duarte, una de las razones de su rechazo era que aún no se había aprobado una constitución; lo que Duarte calló, lo dijo publicamente Sanchez, en Santo Domingo. Al oponerse a esta pretensión de Mella. dijo Sanchez que: “Nadie podía ser Presidente de la Republica Dominicana, sin existir  una constitución”. Ver Ramón  Marrero Aristy. La Republica Dominicana, origen y destino del pueblo cristiano mas antiguo de America, Editora del Caribe, C por A. Ciudad Trujillo, R.D.  1957, Tomo I, pagina. 292.    
            Para los trinitarios era importante que existiera una constitución, antes de que se proclamara un Presidente, tal como hicieron en los Estados Unidos de América, que antes de que tomara posesión George Washington en abril de 1789, habían aprobado una constitución, que este juró sobre una biblia, cumplir y hacer cumplir.
            Si se proclamaba un Presidente, sin una constitución, entonces este,  ya en el poder, trataría de  acomodarla a su conveniencia, que fue lo que ocurrió entre nosotros, con la constitución de  San Cristobal, que Santana y Bobadilla forzaron a que se aprobara un artículo extra, el 210, para justificar la dictadura de Santana  y anular así todos los demás, referentes a las libertades ciudadanas.
            Este horrible ejemplo, fue el precedente  para que desde entonces, todos nuestros presidentes hayan hecho aprobar una constitución conveniente a sus intereses y por eso hemos tenido tantas y por eso, cuando el obstáculo para que nuestro actual Presidente intentara  reelegirse, era que la constitución lo prohibía, se consideró que esto se resolvía (como en efecto ocurrió), facilmente.

            Para Bobadilla, Santana y demás separatistas, afrancesados en ese momento, el funesto precedente que estaban sentando, no tenía importancia, pues ellos creían que pronto seriamos posesión francesa y nos gobernarían desde París, ya que para ellos, la Republica Dominicana de Duarte, libre e independiente de toda dominación extranjera, era una quimera y Duarte un desubicado de la realidad de esos días. 

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