sábado, 15 de mayo de 2010

Fundación de la Policia Nacional

Colaboración para La Información AYER Y HOY
articulosdeopinion2004@yahoo.com FUNDACION DE LA PÓLICIA NACIONAL
Julio M. Rodriguez Grullón

Para inicios de 1936, solo existía una institución que portaba armas de fuego que no estaba bajo el control directo de Trujillo. La Policía Municipal.
Fundada en los albores mismos de la Republica, esta institución tenía el deber de atrapar a los delincuentes y mantener el orden en los pueblos; sus miembros eran respetados y recibían la colaboración, al realizar sus funciones, de los habitantes de su comunidad, púes se nutría de personas provenientes de ella, reconocidas por su probidad.
La inestabilidad política central tradicional del país, no afectaba su funcionamiento, pues económicamente era mantenida por fondos provenientes de fuentes locales de sustentación.
Durante la intervención norteamericana de 1916-24, se respetó su autonomía, aunque la fuerza interventora le restó importancia a su existencia, al fundar el constabulary (otro cuerpo policial), que luego se convirtió en ejército, aunque solo de nombre, pues seguía ejerciendo mas que nada, funciones policiales.
El 2 de marzo de 1936, Trujillo decidió tomar el control de la Policía Municipal. Eliminó su autonomía, la convirtió en Policía Nacional, con un comandante dependiente del gobierno central y fue entonces que sus miembros comenzaron a ser trasladados de una población a otra, de la misma forma que ocurría ya con el ejército.
Durante los años de la dictadura, poco importaba esta situación de dos cuerpos policiales paralelos, desvinculados ambos de la comunidad donde estaban establecidos. El miedo era tal, que los delitos comunes eran pocos, pues nadie se atrevía a hacer nada, ni bien, ni mal, pues todo lo que se hacía, tenía que provenir de la mente privilegiada del Benefactor de la Patria.
De los dos, el ejército era el temido, pues eran las patrullas de este cuerpo militar, que a diario recorrían las calles de las ciudades y se paseaban por los campos, las que mantenían aterrada a la población, cometiendo impunemente toda clase de atropellos.
Han pasado 49 años desde la desaparición de Trujillo, la situación del país es diferente, el ejército se ha alejado de aquellas funciones policiales, (como debe ser) y sin embargo la Policía sigue siendo Nacional, mantiene su arcaica estructura trujillista, sigue desvinculada de las comunidades donde ejerce sus funciones y obviamente no puede ser un organismo eficaz para prevenir el crimen, ni atrapar a los delincuentes, pues no recibe la colaboración que necesita de la comunidad.
Es noticia frecuente, que todos los miembros de una dotación policial tienen que ser reemplazados y trasladados de una comunidad, pues se han ganado con sus actos, el repudio de sus habitantes. Entonces, ¿puede un montón de nuevos desconocidos, recibir la colaboración, imprescindible para el ejercicio de sus funciones, de parte de esa población?
Pensamos que la Policía ya no debe ser Nacional; debemos volver a una policía bajo el control de las autoridades civiles locales. Esto requiere de un proceso bien planificado, que se ejecute gradualmente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario