sábado, 19 de marzo de 2011

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EL 15 DE MARZO DE 1844
Julio M. Rodriguez Gullón

Inmediatamente después del grito de independencia del 27 de febrero de 1844 a las 11 de la noche, fue enviada la goleta Leonor a Curazao, a buscar a Duarte, con una comisión encabezada por Juan Nepomuceno Ravelo, integrada además por Juan Alejandro Acosta y Enrique Duarte Villeta. Zarparon de Santo Domingo el 2 de marzo. Llegaron a Curazao y salen de regreso el 8 de marzo. El 9 de marzo el periódico “Gaceta de Curazao” publicó lo siguiente:
“ La parte española de Santo Domingo se ha separado el 27 de febrero p. p. de la Republica Haitiana y una junta gubernativa provisional se ha formado para encargarse de la directiva hasta cuando el gobierno sea instalado. El señor Bobadilla que estuvo aquí en 1839 es presidente de esa junta, y se cree, que el Señor Juan Pablo Duarte, que se encuentra actualmente aquí, sería elegido presidente de la nueva Republica Dominicana”.
Duarte llegó al puerto de Santo Domingo la noche del 14 de marzo, acompañado de Juan isidro Perez y Pedro Alejandrino Pina, pero su hermano Vicente Celestino, Sanchez, y los demás trinitarios, le pidieron que se quedara a bordo hasta el día siguiente, para organizarle el gran recibimiento que el merecía y así fue. El pueblo de tiró a la calle, se lanzaron cañonazos desde la fortaleza Ozama, Portes le llamó Padre de la Patria, fue recibido por la Junta Central Gubernativa en el Palacio de Borgella y fue hecho miembro de ella. Fue el día mas bello de la Republica.
Esta significativa efemérides nunca se había celebrado en nuestro país. Este año, por iniciativa del Instituto Duartiano, se organizó una lucida ceremonia en la puerta de San Diego, en el muelle de la capital, que fue por donde entró Duarte ese día a la ciudad. Participaron la Marina de Guerra con una embarcación simulando la Goleta Leonor, una delegación del ejército nacional, con una unidad de artilleria que lanzó 19 cañonazos, escolares y la compañía de teatro de Carlota Carretero, la cual presentó un estupendo montaje de los hechos ocurridos ese día en la puerta de San Diego. El profesor José Joaquín Perez Saviñón, Presidente del Instituto Duartiano, pronunció un vibrante discurso.
Aquel día, desde allí, en medio de los vítores de la población, caminó Duarte hasta el Palacio de Borgella, donde fue hecho miembro de la Junta Central Gubernativa. Sin embargo, esta parte de la celebración es imposible de celebrar, porque un edificio histórico, propiedad del estado dominicano, ha sido tomado por la Iglesia Católica para organizar un museo de la Catedral.
El Palacio de Borgella es un edificio de tradición histórica, es del estado y debe preservarse y ser utilizado por este, en ceremonias como estas, de la llegada de Duarte.
El museo de la catedral tiene que buscar otro lugar.

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