sábado, 11 de marzo de 2017

No hubo tal excomunion

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                                                                             Julio M. Rodriguez Grullón

La mañana del miércoles 22 de febrero 2017, el  programa radial Gobierno de la Mañana, que se transmite  por la emisora Z101, se produjo en la casa de Duarte, ubicado en la calle Isabel la Católica y en el, el señor Carlos Peña, un miembro del cuerpo de periodistas radiales que encabeza Alvaro Arvelo hijo, señaló al Padre Benito Angeles, quien fue de los primeros invitados al programa, que el Arzobispo Tomas Portes e Infante, había excomulgado a Juan Pablo Duarte y otros patriotas.
Sorprendido, el Padre Angeles dijo,  (si esto era cierto por supuesto), que entonces la Iglesia debía pedir perdón. Posteriormente en el programa, Juan Daniel Balcácer dijo que no hubo tal excomunión.
Como a mi  también me sorprendió la información, consulté con mi padrino, el Rev. Jose Luis Saez SJ (le llamo así porque fue mi padrino al  ingresar  en la Congregación Mariana Javier, allá por 1958 y luego fue también mi padrino de tesis, al realizar mi maestría de Pensamiento Social, en La Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra en 1990, de donde salió mi libro Trujillo y La Iglesia) quien me dijo que no hubo  tal excomunión, confirmando lo dicho por Juan Daniel.
He  aquí los hechos:
El 23 de diciembre de 1847,  Santana fusiló a José Joaquín Puello y su hermano Gabino; José Joaquín, duartista y héroe de la Batalla de la Estrelleta, era muy popular y el sanguinario de Santana, hacía tiempo lo tenía en su lista de personas,  a las que debía eliminar.
Eso produjo agitación y rumores de desordenes y actos contra el gobierno de Santana y entonces Portes, quien en esos días era Santanista (luego sería opositor y terminó mal de la cabeza), lanzó entonces el 26 de diciembre, lo que llamaríamos una carta pastoral, exhortando a los fieles a obedecer al poder civil y denostando a los que pretendían alterar el orden público.
No utiliza en esa carta el término excomunión.
Duarte para esa época estaba ya internado en la selva venezolana y no tenia nada que ver con lo que estaba ocurriendo aquí. Precisamente el se había alejado para no ser manzana de la discordia entre dominicanos, deprimido por el fusilamiento de María Trinidad Sánchez, el 27 de febrero  de 1845 y a seguidas el envío al exilio, atropellándolos, de todos sus familiares, por lo que  no quedó un solo Duarte Díez en el  país. 
Debemos señalar que la Iglesia tiene su reglamento para las excomuniones y cuando se excomulga a alguien, debe decirse,  el nombre del excomulgado, el delito cometido y el tiempo que va a permanecer   excomulgado. De esto se deduce que no hay excomuniones colectivas indefinidas.
Portes si excomulgó al incestuoso público Ramón Paniagua en 1852, excomunión que fue levantada por Meriño en 1861.
Por otro lado debemos  señalar, que Portes  tuvo una vida de muchos vaivenes políticos  en los primeros días de existencia  de la República Dominicana.
Recibió a Duarte el 15 de marzo de 1844 en la Puerta de San Diego exclamando, “Salve Padre de la Patria”, pero en realidad estaba con los separatistas, quienes en esos días tenían en marcha el Plan Levasseur,  en el que trabajaba activamente el cónsul francés Saint Denys.
Sus problemas comenzaron cuando los códigos napoleónicos             que Boyer había extendido a toda la isla, fueron mantenidos en la República Dominicana,  al iniciarse el gobierno de Pedro Santana en 1845.
Portes luchaba contra el establecimiento del matrimonio civil  y por la restauración del derecho a las personas a legar bienes a la iglesia, que el régimen de Boyer había debilitado, al expropiarle sus propiedades y cerrar la mayoría de los templos. Esto reflejaba la lucha en Francia entre la revolución de 1789 y la Iglesia Católica,  que estaba opuesta a la separación de  la iglesia y el estado y apoyaba  la monarquía.
Ciertamente que la democracia, aunque implica separación de iglesia y estado, no prohíbe a la iglesia o las iglesias tener sus propiedades y expresarse públicamente. En los Estados Unidos, la Iglesia Católica se fortaleció a partir de 1789, cuando tomó posesión  de la presidencia George Washington, pues se le respetaron mas sus derechos que en los tiempos coloniales.



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