JOSE ESTRELLA CAE EN DESGRACIA
José Estrella era, desde los inicios de la dictadura trujillista, la figura política mas importante en el Cibao, ostentando el cargo de Comisionado Especial para la región.
En 1940, cuando Trujillo estuvo al borde de la muerte por el anthrax en el cuello, el realizó acciones tendientes a tomar el poder político a nivel nacional.
Luego que Trujillo se recuperó de su gravedad e hizo el viaje de salud a Estados Unidos, que inesperadamente resultó en la firma del tratado Trujillo-Hull, una vez retorno de ese viaje, José Estrella pagó bien caro, lo que Trujillo consideró un atrevimiento.
Lo que ocurrió en el caso de José Estrella, puede tomarse como un ejemplo de lo que le ocurría regularmente a los que ostentaban posiciones importantes cerca de Trujillo.
A mediados de octubre 1940 Trujillo nombró gobernador de Santiago a Mario Fermín Cabral y unos días después José Estrella estaba preso, se celebraban mítines aquí denunciando sus atropellos y se le obligaba a devolver tierras que se había robado a campesinos ; a mediados de noviembre, se apresa también a Rafael Estrella Ureña, Tomas Estrella, Luis Silverio Gomez ex -diputado y ex-gobernador y un grupo de personas, acusándolos, junto a José Estrella, del asesinato de Virgilio Martinez Reyna y su esposa embarazada en San José de las Matas, el crimen horripilante con que se estrenó la tiranía, en junio de 1930.
Ahora, 10 años después “la justicia trujillista apresa a sus autores”.
Y como si todo esto fuera poco se acusó a José Estrella de haber asesinado a José Felipe Roca el 2 de febrero de 1933 y se le condenó sumariamente a 20 años de trabajos públicos.
Luis Silverio Gómez se suicidó en la cárcel fruto de la vergüenza, sin esperar el desenlace de todo este drama, cuando en marzo de 1941, el tribunal que juzgó al grupo, declaró que los acusados habían sido descargados, porque la acción de la justicia había prescrito.
A seguidas, para sorpresa de todos, es destituido como gobernador de Santiago y encarcelado, Mario Fermín Cabral, autor de la idea del cambio de nombre de la capital de Santo Domingo a Ciudad Trujillo y el Tte Coronel Luis Veras Fernandez, quien comandaba la fortaleza San Luis, acusados de haber violentado el tribunal, para que dictara la sentencia favorable a los acusados del crimen en San José de las Matas.
Al mes siguiente fueron liberados estos dos personajes, serviles del tirano.
Todos los involucrados en esta tragicomedia siguieron sirviendo a Trujillo, quien los había humillado y desconsiderado, rebajando su imagen pública a la de simples lacayos.
Esa era la forma en que El Jefe manejaba a sus servidores.
José Estrella cinicamente solicitó al congreso que los crímenes de Martinez Reyna y Felipe Roca fueran declarados crímenes políticos y que a sus autores les fuera concedida amnistía.
sábado, 24 de septiembre de 2011
domingo, 18 de septiembre de 2011
Colaboracion para La Informacion AYER Y HOY
articulosdeopinion2004@yahoo.com Dr. Luis E. Aybar (1881-1934)
Julio M. Rodriguez Grullón
En el año 1961, después de la muerte de Trujillo, el hospital que desde su inauguración en 1946 se conocía como Dr. William Morgan, le fue cambiado el nombre por el de Dr. Luis E. Aybar.
Luis Eduardo Aybar Jiménez nació en Santo Domingo, el 21 de junio de 1881; en 1904 se graduó de licenciado en medicina en el Instituto Profesional, después de lo cual se dedicó al ejercicio de su profesión por siete años en la región este del país, donde adquirió fama de cirujano excepcional. Partió hacia Paris, en el año 1912, a perfeccionar sus conocimientos y habilidades quirúrgicas, con los mejores profesores de cirugía de la escuela de medicina de la Universidad de la Sorbona. En 1914 regresó al país donde casó con la distinguida señorita Lea de Castro.
Ese mismo año regresó a Europa, esta vez a Bruselas, Bélgica, como cónsul dominicano, donde le sorprendió la 1ra guerra mundial, empleando sus habilidades quirúrgicas en los heridos de este conflicto bélico, realizando extraordinarios procedimientos en el abdomen de ellos.
Terminada la guerra regresó al país y se convirtió en un activo luchador contra la intervención americana de 1916-24.
Fue presidente de la Cruz Roja Dominicana y de la Asociación Medica Dominicana.
En 1929 fue propuesto como Presidente de la Republica en una boleta electoral con Rafael Estrella Ureña como vicepresidente, para oponerse a la reelección de Horacio Vásquez. Rechazó la propuesta con estas palabras:
“Los partidos políticos no han evolucionado; las ideas políticas no han evolucionado y los métodos políticos no han evolucionado. Es mas, no se advierte siquiera una remota tendencia de evolución en los hombres, en los partidos, ni en los objetivos políticos. Son los mismos viejos caudillos, conduciendo las mismas huestes, por los mismos caminos y con los mismos viejos
sistemas”.
En enero de 1930, inauguró su clínica en Santo Domingo, a la que llamó Las Mercedes y luego del ciclón de San Zenón, la abrió a todo el mundo y la convirtió en un centro de socorro. En esos días logró con la Cruz Roja, el inicio de un hospital de emergencia para los niños víctimas del ciclón, que fue el arranque de la pediatría en el país.
En 1932, Trujillo le encomendó personalmente la atención de la educadora Ercilia Pepín. Ese año inauguro el primer departamento de urología en el país, en su clínica Las Mercedes.
Murió en 1934, a los 53 años de edad, víctima de un ataque de Fiebre Tifoidea.
articulosdeopinion2004@yahoo.com Dr. Luis E. Aybar (1881-1934)
Julio M. Rodriguez Grullón
En el año 1961, después de la muerte de Trujillo, el hospital que desde su inauguración en 1946 se conocía como Dr. William Morgan, le fue cambiado el nombre por el de Dr. Luis E. Aybar.
Luis Eduardo Aybar Jiménez nació en Santo Domingo, el 21 de junio de 1881; en 1904 se graduó de licenciado en medicina en el Instituto Profesional, después de lo cual se dedicó al ejercicio de su profesión por siete años en la región este del país, donde adquirió fama de cirujano excepcional. Partió hacia Paris, en el año 1912, a perfeccionar sus conocimientos y habilidades quirúrgicas, con los mejores profesores de cirugía de la escuela de medicina de la Universidad de la Sorbona. En 1914 regresó al país donde casó con la distinguida señorita Lea de Castro.
Ese mismo año regresó a Europa, esta vez a Bruselas, Bélgica, como cónsul dominicano, donde le sorprendió la 1ra guerra mundial, empleando sus habilidades quirúrgicas en los heridos de este conflicto bélico, realizando extraordinarios procedimientos en el abdomen de ellos.
Terminada la guerra regresó al país y se convirtió en un activo luchador contra la intervención americana de 1916-24.
Fue presidente de la Cruz Roja Dominicana y de la Asociación Medica Dominicana.
En 1929 fue propuesto como Presidente de la Republica en una boleta electoral con Rafael Estrella Ureña como vicepresidente, para oponerse a la reelección de Horacio Vásquez. Rechazó la propuesta con estas palabras:
“Los partidos políticos no han evolucionado; las ideas políticas no han evolucionado y los métodos políticos no han evolucionado. Es mas, no se advierte siquiera una remota tendencia de evolución en los hombres, en los partidos, ni en los objetivos políticos. Son los mismos viejos caudillos, conduciendo las mismas huestes, por los mismos caminos y con los mismos viejos
sistemas”.
En enero de 1930, inauguró su clínica en Santo Domingo, a la que llamó Las Mercedes y luego del ciclón de San Zenón, la abrió a todo el mundo y la convirtió en un centro de socorro. En esos días logró con la Cruz Roja, el inicio de un hospital de emergencia para los niños víctimas del ciclón, que fue el arranque de la pediatría en el país.
En 1932, Trujillo le encomendó personalmente la atención de la educadora Ercilia Pepín. Ese año inauguro el primer departamento de urología en el país, en su clínica Las Mercedes.
Murió en 1934, a los 53 años de edad, víctima de un ataque de Fiebre Tifoidea.
sábado, 10 de septiembre de 2011
Colaboracion para La Informacion AYER Y HOY
articulosdeopinion2004@yahoo.com EUCLIDES GUTIERREZ FELIX
Julio M. Rodriguez Grullón
En 1946 llegó a Montecristi la familia Gutiérrez Félix. El padre había sido capitán del ejército. Fue separado del mismo por diferencias con Aníbal, hermano de Trujillo y luego, en ese 1946 , en San Fco de Macorís, un miembro de la familia había participado en manifestaciones antitrujillistas.
En Montecristi estaba la Grenada Company, filial de la multinacional del guineo United Fruit Co, donde estaban refugiadas muchas personas en situación difícil con la tiranía, pues ofrecía un trabajo estable, bien remunerado, que no dependía del tirano.
El patio de la casa donde se instaló inicialmente la familia, colindaba con el patio de mi casa y Euclides y yo nos juntábamos allí con frecuencia, estábamos en el mismo curso en la escuela y luego tocábamos en la banda municipal de música. En 1954, al graduarnos de bachiller, nuestras vidas tomaron diferentes caminos. El estudió derecho, yo estudié medicina, pero a pesar de la separación, la amistad con el y su familia, se ha mantenido inquebrantable a través de los años.
Para 1954, Euclides contaba 18 años de edad y su personalidad ya estaba bien definida: Inteligente, valiente, extrovertido, amante de la verdad histórica, sobre la que ya comenzaba a hurgar en sus conversaciones con las personas mayores ilustradas del pueblo y alguien que no titubeaba en llamar, al pan, pan y al vino, vino.
En 1961, tres meses antes de ser ajusticiado, Trujillo designó legisladores a un grupo de jóvenes abogados. A Euclides lo hizo senador y desde entonces, ha estado en la palestra.
Juan Bosch le atrajo, al extremo que le sirvió por mas de tres décadas, con lealtad y eficiencia, convirtiéndose en uno de sus mas cercanos colaboradores. Participó activamente en la revolución constitucionalista de abril de 1965, formando parte del gabinete de Caamaño y a partir de 1973, ha sido el defensor público por excelencia de Bosch y el PLD.
El dice que su posición económica se debe a la herencia de su padre, al ministerio que ha ocupado por espacio de 11 años, a los 50 años que tiene en el ejercicio de su profesión y además, a los beneficios de sus libros, que editoras internacionales han traducido a varios idiomas y promovido en países desarrollados; sus detractores, sin conocer los detalles de este último alegato, se niegan a reconocérselo.
En 2008, Euclides, con el apoyo de sus vecinos, demandó a la CDEE, porque le estaba cobrando una factura, por un servicio que no le estaba prestando. El conflicto se había venido arrastrando por tres años.
Recientemente, ha tenido enfrentamientos con las comunicadoras Alicia Ortega y Nuria Piera, quienes lo acusan de corrupto. A esta última la demandó, e intimó a sus anunciantes con demandarlos a ellos también. Entonces, por el momento político que vivimos, el Comité Político del PLD, decidió tomar cartas en los asuntos de Euclides y este, como miembro prominente y disciplinado de el, ha acatado sus decisiones.
articulosdeopinion2004@yahoo.com EUCLIDES GUTIERREZ FELIX
Julio M. Rodriguez Grullón
En 1946 llegó a Montecristi la familia Gutiérrez Félix. El padre había sido capitán del ejército. Fue separado del mismo por diferencias con Aníbal, hermano de Trujillo y luego, en ese 1946 , en San Fco de Macorís, un miembro de la familia había participado en manifestaciones antitrujillistas.
En Montecristi estaba la Grenada Company, filial de la multinacional del guineo United Fruit Co, donde estaban refugiadas muchas personas en situación difícil con la tiranía, pues ofrecía un trabajo estable, bien remunerado, que no dependía del tirano.
El patio de la casa donde se instaló inicialmente la familia, colindaba con el patio de mi casa y Euclides y yo nos juntábamos allí con frecuencia, estábamos en el mismo curso en la escuela y luego tocábamos en la banda municipal de música. En 1954, al graduarnos de bachiller, nuestras vidas tomaron diferentes caminos. El estudió derecho, yo estudié medicina, pero a pesar de la separación, la amistad con el y su familia, se ha mantenido inquebrantable a través de los años.
Para 1954, Euclides contaba 18 años de edad y su personalidad ya estaba bien definida: Inteligente, valiente, extrovertido, amante de la verdad histórica, sobre la que ya comenzaba a hurgar en sus conversaciones con las personas mayores ilustradas del pueblo y alguien que no titubeaba en llamar, al pan, pan y al vino, vino.
En 1961, tres meses antes de ser ajusticiado, Trujillo designó legisladores a un grupo de jóvenes abogados. A Euclides lo hizo senador y desde entonces, ha estado en la palestra.
Juan Bosch le atrajo, al extremo que le sirvió por mas de tres décadas, con lealtad y eficiencia, convirtiéndose en uno de sus mas cercanos colaboradores. Participó activamente en la revolución constitucionalista de abril de 1965, formando parte del gabinete de Caamaño y a partir de 1973, ha sido el defensor público por excelencia de Bosch y el PLD.
El dice que su posición económica se debe a la herencia de su padre, al ministerio que ha ocupado por espacio de 11 años, a los 50 años que tiene en el ejercicio de su profesión y además, a los beneficios de sus libros, que editoras internacionales han traducido a varios idiomas y promovido en países desarrollados; sus detractores, sin conocer los detalles de este último alegato, se niegan a reconocérselo.
En 2008, Euclides, con el apoyo de sus vecinos, demandó a la CDEE, porque le estaba cobrando una factura, por un servicio que no le estaba prestando. El conflicto se había venido arrastrando por tres años.
Recientemente, ha tenido enfrentamientos con las comunicadoras Alicia Ortega y Nuria Piera, quienes lo acusan de corrupto. A esta última la demandó, e intimó a sus anunciantes con demandarlos a ellos también. Entonces, por el momento político que vivimos, el Comité Político del PLD, decidió tomar cartas en los asuntos de Euclides y este, como miembro prominente y disciplinado de el, ha acatado sus decisiones.
sábado, 3 de septiembre de 2011
Colaboracion para La Informacion AYER Y HOY
articulosdeopinion2004@yahoo.com EL COLEGIO MEDICO NO ES UN GREMIO
Julio M. Rodriguez Grullón
Por mucho tiempo los médicos que actuábamos en la antigua Asociación Medica Dominicana (AMD), añorábamos poderla convertir en colegio.
La idea era que al convertirnos en parte del estado y ser la membresía obligatoria para poder ejercer la profesión, así podríamos controlar mejor el ejercicio de ella y elevar la calidad de la atención medica que recibían nuestros pacientes.
La realidad ha sido otra.
Aunque se han escrito los reglamentos para la certificación y recertificación de los médicos en ejercicio, son letra muerta, pues ninguna de las sociedades especializadas, ni el colegio en si, que yo sepa, han dedicado recursos, o han tomado medidas para lograr este fin.
Lo que se ha impuesto es la pasión político-partidista; si la directiva del colegio se inclina por un partido político en la oposición, lo que se busca es la forma de criticar todo lo que hace el gobierno. Si es el caso contrario, se piensa entonces que la directiva es dócil ante los deseos del gobierno, aunque critique sus acciones.
En las elecciones pasadas se llegó al colmo de que los candidatos abiertamente se identificaban con un partido o con otro y las elecciones se convirtieron en un forcejeo que poco tuvo que ver con las funciones del colegio, sino en demostrar que un partido tenía mas fuerza que el otro.
El “colegio” no ha sometido a un juicio disciplinario a ningún medico por falta cometidas en el ejercicio, a pesar de que se le han sometido casos donde era fácil comprobar esas faltas; al contrario, siempre se manifiesta en defensa del médico y trata de desvirtuar cualquier acusación, como si todavía fuera un gremio, cuya finalidad es defender al acusado y nada mas.
En la actualidad nuevamente comienzan a soplar los vientos eleccionarios en el colegio, ojalá esta vez no se repita el penoso espectáculo de las elecciones pasadas y tengamos candidatos empeñados en resaltar sus méritos profesionales y de actividad en el colegio, no su filiación política.
Los candidatos deben representar grupos de médicos, integrados de forma heterogénea, por colegas que pertenecen a distintos partidos, basar su campaña en los objetivos de un colegio, hablar de certificación y recertificación médicas y de mejorar el cumplimiento del deber en los hospitales públicos. Entonces nuestros reclamos de reajuste salarial tendrán mas fuerza.
Finalmente, no es ocioso recordar ahora, que la base de nuestros reclamos debe ser, que estamos ofreciendo a la población una atención medica óptima, porque estamos al día en los avances de nuestra profesión y la única forma de demostrar esto, es con la certificación y recertificación médicas.
articulosdeopinion2004@yahoo.com EL COLEGIO MEDICO NO ES UN GREMIO
Julio M. Rodriguez Grullón
Por mucho tiempo los médicos que actuábamos en la antigua Asociación Medica Dominicana (AMD), añorábamos poderla convertir en colegio.
La idea era que al convertirnos en parte del estado y ser la membresía obligatoria para poder ejercer la profesión, así podríamos controlar mejor el ejercicio de ella y elevar la calidad de la atención medica que recibían nuestros pacientes.
La realidad ha sido otra.
Aunque se han escrito los reglamentos para la certificación y recertificación de los médicos en ejercicio, son letra muerta, pues ninguna de las sociedades especializadas, ni el colegio en si, que yo sepa, han dedicado recursos, o han tomado medidas para lograr este fin.
Lo que se ha impuesto es la pasión político-partidista; si la directiva del colegio se inclina por un partido político en la oposición, lo que se busca es la forma de criticar todo lo que hace el gobierno. Si es el caso contrario, se piensa entonces que la directiva es dócil ante los deseos del gobierno, aunque critique sus acciones.
En las elecciones pasadas se llegó al colmo de que los candidatos abiertamente se identificaban con un partido o con otro y las elecciones se convirtieron en un forcejeo que poco tuvo que ver con las funciones del colegio, sino en demostrar que un partido tenía mas fuerza que el otro.
El “colegio” no ha sometido a un juicio disciplinario a ningún medico por falta cometidas en el ejercicio, a pesar de que se le han sometido casos donde era fácil comprobar esas faltas; al contrario, siempre se manifiesta en defensa del médico y trata de desvirtuar cualquier acusación, como si todavía fuera un gremio, cuya finalidad es defender al acusado y nada mas.
En la actualidad nuevamente comienzan a soplar los vientos eleccionarios en el colegio, ojalá esta vez no se repita el penoso espectáculo de las elecciones pasadas y tengamos candidatos empeñados en resaltar sus méritos profesionales y de actividad en el colegio, no su filiación política.
Los candidatos deben representar grupos de médicos, integrados de forma heterogénea, por colegas que pertenecen a distintos partidos, basar su campaña en los objetivos de un colegio, hablar de certificación y recertificación médicas y de mejorar el cumplimiento del deber en los hospitales públicos. Entonces nuestros reclamos de reajuste salarial tendrán mas fuerza.
Finalmente, no es ocioso recordar ahora, que la base de nuestros reclamos debe ser, que estamos ofreciendo a la población una atención medica óptima, porque estamos al día en los avances de nuestra profesión y la única forma de demostrar esto, es con la certificación y recertificación médicas.
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